Crear una empresa no es tarea fácil; por eso, Urratsbat opta por convertir a los centros en viveros e incubadoras de empresas. En cada uno de los centros las personas promotoras disponen del servicio de la Oficina de la Persona Emprendedora, oficina debidamente equipada y disponible de forma gratuita.
Si los proyectos empresariales así lo requieren, los participantes del programa podrán también usar otras instalaciones, como talleres del centro para realizar los prototipos del producto en fase de estudio. Además, cada centro dispone de una persona que realiza labores de sensibilización y dinamización de proyectos empresariales. Se fija como objetivo apoyar y dinamizar toda aquella idea de negocio que tenga promotores/as dispuestos a llevarla a cabo en un futuro.
Con la ayuda de asesorías externas se facilitará a los emprendedores la generación de un plan de negocio que le pueda abrir las puestas de instituciones especializadas y se facilitará contactos para su puesta en marcha, así como el necesario acompañamiento en esos primeros pasos.