Realizamos diferentes “circuitos”, nos agarramos a la barra para no caernos y tener un apoyo (aprovechamos para mirarnos al espejo), avanzamos hasta el cuadrado y entramos/salimos, y vuelta a empezar. Para la maduración de un niño pasar por la fase de gateo y progresivamente secuenciar la acción de ponerse de pies es todo un logro. Con este juego nuestro cuerpo trabaja el equilibrio y la coordinación, es una conquista hacia la verticalidad (juego de pie). Unos buenos apoyos son muy importantes no solo a nivel corporal, sino también a nivel emocional. ¡Me hago mayor!
Categoría: Educación infantil