El alumnado del aula de 4 años de Calasanz, nuestros campeones y campeonas, ha tenido la oportunidad de disfrutar de un día diferente y muy especial. Ha sido un día de experimentar y de vivir en primera persona aquellas vivencias que damos por sentadas solo por ser contadas. Ver, escuchar, tocar y sentir han sido las acciones que resumen el día.
Ha sido su primera excursión con sus amigos y amigas; la pandemia comenzó cuando estaban en el aula de dos años, y cuando estaban en el aula de tres, de acuerdo con las medidas de prevención, no se pudo realizar ninguna salida. Por ello, para muchos, coger un autobús de la mano de Autobuses Vigiola y viajar acompañados de sus amigos y amigas fuera del aula ha sido una experiencia nueva y gratificante para empezar el día.
Granja Murrieta ha sido el destino donde hemos conocido cómo viven, cuidan y miman a las vacas lecheras. Hemos podido ver como ellas mismas deciden ordeñarse y cómo lo logran gracias a un robot que tienen a su disposición, el cual regula la cantidad y la calidad de vida de las vacas para hacerlo de forma escalonada, tranquila, y de provecho.
Además, hemos podido ordeñar nosotros mismos a una vaca. Aprender cómo se ordeña y ver de dónde se obtiene la leche y de qué manera ha sido increíble. La leche que hemos conseguido se la hemos llevado a las terneras para alimentarlas y además, ¡hemos podido probarla nosotros mismos!
Después de realizar la visita a la granja y vivir todos los momentos que os hemos contado, tuvimos la gran suerte de ver el nacimiento de un ternero. Itziar, la monitora de la granja, nos explicó cómo se produce la gestación, su duración y como se trata el parto de la vaca, pudiendo ver con nuestros propios ojos como la vaca cuidaba en los primeros minutos de vida a su ternero, limpiandolo y dándole su calor.
Con esta experiencia en la mochila y las pilas cargadas, seguimos aprendiendo y dispuestos a vivir mil experiencias más. ESKERRIK ASKO GRANJA MURRIETA ETA VIGIOLA! ZORIONAK 4 URTEKO UMEAK! LAN BIKAINA!